3. Conseguir más ventas y fidelizar tus clientes: ¿tu web es responsive?

Te damos dos datos claves para el post de hoy:

  1. El 90% de las personas buscan servicios o negocios online.
  2. De estas personas, el 56% los buscan desde su móvil.

Estos datos lo dicen todo: si tu establecimiento turístico o negocio, sea cual sea, no tiene una página web fácil de utilizar y fácil de encontrar en Google, ¡es como si fuera invisible!
Y seguro que a ti te dan miedo los fantasmas. Sobre todo si el fantasma… es tu empresa!

Así que aquí van algunos consejos para que tu web se convierta en el principal embudo de venta de tu negocio:

  1. Asegúrate de que tu página web sea responsive. Es decir, que se vea bien tanto en un PC, en una Tablet como un móvil. No sabes desde qué tipo de dispositivo tu próximo cliente mirará tu página web. Sea cual sea, ¡tu web debe verse PERFECTAMENTE! Y si no es el caso, sólo hay un remedio: haz los cambios oportunos para que lo sea, de lo contrario… estás perdiendo ventas.
  2. Tu página web debe ser tan fácil de usar que sus usuarios tengan la sensación de que la controlan. Pero… ¡en realidad tú controlarás lo que verán primero! Tu página web debe ser agradable, clara, y fácil de utilizar. Y las secciones que te interesa que los usuarios visiten deben saltar a la vista: desde un botón de RESERVA a un formulario de contacto, debes guiar a tus clientes potenciales para que realicen la acción que a TI te interesa que realicen.
  3. Poco texto, contenidos visuales: ya conoces el dicho, «Una imagen vale más que 1000 palabras». ¿Quieres presentar tu negocio? Haz un vídeo corporativo. ¿Cuáles son tus puntos fuertes? ¿Las vistas, la gastronomía, la comodidad, el equipo? ¡Sácales fotos a estas bazas que hacen de tu establecimiento un lugar único!
  4. No centres el contenido de tu página web en tus productos o servicios. Céntralo en el tipo de experiencia que tus clientes podrán vivir, en el problema que resuelves con lo que ofreces, en lo que tus clientes recibirán, sentirán, vivirán. Es la mejor manera de que tus clientes potenciales se sientan identificados con tu marca, y por ende… ¡Te acaben comprando!

¡Nos vemos en el próximo post!